Cáncer de próstata incidental: ¿Por qué deberíamos prestarle más atención?
- Doctor Juan Carlos Galvis
- 12 abr
- 4 Min. de lectura
El cáncer de próstata es uno de los tumores malignos más frecuentes en los hombres y su detección temprana suele ser clave para un buen pronóstico. Sin embargo, existe una situación particular a la que muchas veces no se le otorga la relevancia necesaria en las guías clínicas: el cáncer de próstata incidental.
Este tipo de cáncer se detecta por sorpresa tras la cirugía realizada para tratar la hiperplasia benigna de próstata (HBP), un procedimiento que comúnmente se hace para aliviar síntomas urinarios. Cuando se descubre un tumor en la próstata al analizar el tejido extirpado, se le denomina cáncer de próstata incidental o estadios T1a y T1b.
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¿Qué es el cáncer de próstata incidental?
Incidental T1a: Tumor descubierto de forma inesperada en menos del 5% del tejido extraído durante la cirugía de próstata por HBP y generalmente con baja agresividad (grado de grupo ISUP 1).
Incidental T1b: Tumor que se encuentra en más del 5% del tejido resecado o de mayor agresividad (grado de grupo ISUP ≥2).
Esta clasificación surge porque, en muchos casos, la cirugía para la hiperplasia benigna se realiza sin sospecha previa de cáncer. De ahí la sorpresa y la necesidad de un abordaje específico para evitar pasarlo por alto.
Relevancia y desafíos
Los expertos señalan que, a pesar de la frecuencia con la que sucede el hallazgo de un cáncer incidental, las guías de práctica clínica internacionales (como las de la Asociación Europea de Urología) apenas mencionan el estadio T1a/b. Los puntos clave que plantean los autores son:
Clasificación imprecisa: El límite de 5% de afectación tumoral en el tejido extirpado es arbitrario y, a veces, difícil de determinar de forma estandarizada.
Grado ISUP: La distinción entre tumores de grado 1 y ≥2 es crucial para determinar la agresividad y la necesidad de seguimiento o tratamiento.
Evaluación postoperatoria: Es esencial valorar niveles de PSA (antígeno prostático específico) y su densidad (PSA density o PSAd), así como el uso de resonancia magnética multiparamétrica (mpMRI) para descartar focos tumorales residuales fuera de la zona transicional, que normalmente es la resecada en cirugías de HBP.
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¿Cómo se detecta y se maneja el cáncer incidental?

Examen de PSA posterior a la cirugía: Si los niveles de PSA bajan de manera significativa (por ejemplo, <1 ng/ml) y la densidad de PSA (PSAd) es muy baja, esto sugiere que la mayor parte del tejido prostático afectado ha sido removido durante la cirugía de HBP.
Resonancia magnética multiparamétrica (mpMRI): Se recomienda realizarla para comprobar si queda algún área sospechosa de cáncer en la zona periférica de la próstata (o en otras zonas) que no haya sido resecada.
Biopsia dirigida: Si la resonancia magnética muestra lesiones sospechosas, se realiza una biopsia dirigida para confirmar o descartar la presencia de enfermedad significativa.
Vigilancia activa o tratamiento activo:
Vigilancia activa: Indicada para lesiones de bajo riesgo (ISUP 1, PSA bajo, PSAd baja y hallazgos de imagen no agresivos), sobre todo en pacientes con una esperanza de vida larga.
Watchful waiting (observación sin intención curativa): Suele proponerse en pacientes de mayor edad o con comorbilidades importantes, donde la progresión del cáncer podría no impactar significativamente en la calidad o la expectativa de vida.
Tratamiento activo: En casos de enfermedad más agresiva (por ejemplo, ISUP ≥2 y otros factores de alto riesgo), se valora cirugía radical, radioterapia u otras opciones según la situación clínica.
¿Por qué es importante hablar de ello?

Mejorar el pronóstico: Detectar a tiempo un tumor que no estaba inicialmente en el radar clínico permite ajustar rápidamente el seguimiento y, si hace falta, el tratamiento.
Evitar tratamientos innecesarios: Muchos de estos cánceres descubiertos incidentalmente son de bajo grado y no requieren terapias agresivas, sino un seguimiento cuidadoso (vigilancia activa).
Personalizar la atención: Cada paciente tiene un contexto diferente (edad, comorbilidades, tamaño tumoral, valores de PSA, etc.). Es fundamental un abordaje individualizado.
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Mensaje final para los pacientes
Si tras una cirugía de hiperplasia benigna de próstata se detecta un tumor en la muestra analizada, no se alarme inmediatamente. De la mano de un especialista, se evaluarán factores como el resultado del estudio patológico, los niveles de PSA posteriores a la intervención y, si es necesario, pruebas de imagen. Con esa información será posible decidir si basta con una estrecha vigilancia o si se necesitan tratamientos más intensivos.
En la consulta con el Dr. Juan Carlos Galvis, se realizará una evaluación detallada para determinar el mejor plan de acción, siempre velando por la calidad de vida y la seguridad del paciente. El cáncer de próstata incidental puede presentar un pronóstico muy favorable en la mayoría de los casos, especialmente cuando se maneja de forma adecuada.
Referencias principales
Mottet N., Rouviere O., van der Kwast T.H. (2022). “Incidental Prostate Cancer: A Real Need for Expansion in Guidelines?” European Urology Oncology, 5(2): 259-260.
EAU-EANM-ESTRO-ESUR-ISUP-SIOG (2021). Guidelines on Prostate Cancer. European Association of Urology.
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